Un programa de mantenimiento bien planificado evita tiempos de parada innecesarios o reparaciones costosas. También promueve la seguridad y ayuda a prolongar la vida útil del equipo. Debe establecerse un cronograma de inspección y mantener un registro de la sala de calderas con las actividades de mantenimiento diarias, semanales, mensuales y anuales. Esto proporciona una valiosa guía y ayuda a obtener el factor de disponibilidad de la caldera para determinar la frecuencia de paradas, los ahorros, la duración del servicio entre otros.
A pesar de que la caldera tiene dispositivos eléctricos y mecánicos que la hacen automática o semiautomática en funcionamiento, estos dispositivos requieren un mantenimiento sistemático y periódico. Cualquier característica «automática» no libera al supervisor de la responsabilidad, sino que lo libera de varias tareas repetitivas. Una buena limpieza ayuda a mantener un aspecto profesional en la sala de calderas. Solo se debe permitir que el personal capacitado y autorizado opere, ajuste o repare la caldera y sus equipos auxiliares.
El estado de alerta en el reconocimiento de ruidos inusuales, lecturas inadecuadas de los instrumentos, fugas y signos de sobrecalentamiento pueden prevenir al supervisor de un mal funcionamiento pudiendo así, iniciar una acción correctiva rápida que puede evitar reparaciones excesivas o tiempos de parada inesperados.
Todas las conexiones de tuberías al sistema y sus accesorios deben mantenerse a prueba de fugas porque incluso una fuga menor, si se descuida, pronto puede volverse grave. Esto se aplica especialmente al vidrio del medidor de nivel de agua, el control del nivel del agua, las tuberías, válvulas y empaques de entrada de mano y entrada de hombre. Si se producen fugas graves, apague la caldera inmediatamente y reduzca gradualmente la presión de vapor. No intente hacer reparaciones mientras la caldera esté bajo presión.
El mantenimiento de cambio de turno debe incluir:
- La comprobación del nivel de agua de la caldera en el vidrio del medidor.
- La presión de vapor de la caldera en el medidor.
- Verificación de purgas.
- Verificar el giro libre de las válvulas de la columna de agua y visor.
- Supervise la química del agua para ajustar el tratamiento de alimentación, para permanecer dentro de las pautas de tratamiento de agua establecidas por el fabricante.
El mantenimiento diario debe incluir:
- Un control del funcionamiento del quemador, incluyendo la presión del combustible, la presión de aire o vapor de atomización, la apariencia visual, entre otros.
- Limpie las mirillas de observación durante períodos de bajo fuego o apagado.
- Pruebe las alarmas de nivel de la caldera y el corte de agua (bajo nivel).
- Mantenga un horario diario de purga.
Mantenimiento mensual
Verifique el estado del refractario en busca de daños significativos o grietas. Parche o repare el refractario según sea necesario. Se recomienda el revestimiento de lavado frecuente de las superficies refractarias. Para este fin, utilice un mortero del tipo de secado al aire, de alta temperatura, diluido con agua, hasta obtener la consistencia de una crema ligera. Esto sellará pequeñas grietas y prolongará la vida útil del refractario. Cualquier grieta grande debe limpiarse y rellenarse con mortero.
Siga las recomendaciones relacionadas con la inspección y prueba de válvulas de seguridad. La frecuencia de las pruebas, ya sea mediante el uso de la palanca elevadora o elevando la presión del vapor, debe basarse en los estándares respectivos.
Pruebe las válvulas de seguridad de la caldera de acuerdo con las instrucciones del fabricante para estar absolutamente seguro de que las válvulas no se han cerrado por corrosión. ¡La falla de las válvulas de seguridad en una situación de sobrepresión es DESASTROSA!
Mantenimiento anual
Limpie tanto el lado de calefacción como el lado caliente de la caldera. Quite todas las tapas de las bocas de acceso y las bocas de inspección. Abra todas las válvulas de purga y drenaje inferiores. Lave el interior de la caldera con agua limpia a alta presión. Use un raspador manual para eliminar el lodo y las incrustaciones acumulados. Comience cerca de la parte superior y trabaje hacia la parte inferior. Después de limpiar los exteriores de los tubos, inspeccione las superficies de los tubos en busca de signos de sobrecalentamiento, como superficies abultadas y enegrecidas en los tubos.
Las condiciones locales específicas determinan el uso de almacenamiento «húmedo» o «seco» durante los períodos de parada. Si no está seguro de qué procedimiento seguir, comuníquese con el consultor de tratamiento de agua o con su compañía de mantenimiento especializada.
Reemplazo de empaques de bridas, manway y handhole
- Limpie las superficies de metal donde la placa de la cubierta se apoya contra la placa de la carcasa o el anillo.
- Utilice siempre juntas nuevas. Aplique pasta de grafito a la junta para evitar que se pegue y asegurar la estanqueidad.
- Tenga cuidado al centrar la placa de cubierta y la junta en la abertura de la carcasa. Saque los pernos firmemente. Los yugos están diseñados para colocar y sujetar las cubiertas únicamente. El sellado de la junta se logra mediante la aplicación de presión interna.
- Las juntas de repuesto deben mantenerse en su inventario para minimizar el tiempo de inactividad.
Otras actividades recomendadas dentro del mantenimiento anual:
o Inspeccione y limpie las superficies junto a la chimenea.
o Inspeccione todo el material refractario del quemador.
o Inspeccione todas las juntas de las bocas de inspección en busca de fugas.
o Inspeccione y pruebe todas las válvulas del sistema.
o Inspeccione y pruebe todas las válvulas de seguridad.
o Limpie y reconstruya el corte por bajo nivel de agua.
o Vuelva a calibrar todos los controles operativos.
o Revisión de bombas de agua de alimentación.
o Limpie el receptor de condensados.
o Inspeccione los terminales eléctricos.
o Revise los niveles de aceite combustible.
o Limpiar e inspeccionar chimeneas.
o Limpieza y puesta a punto de caldera y componentes.
o Mantenga limpias las mirillas. Esto permite una vista clara de la llama del quemador y cualquier acumulación de carbón en la cámara de combustión de la caldera (según sea necesario).
o Mantenga los filtros de aire limpios. Un filtro de aire obstruido puede provocar una mala mezcla de aire/aceite y la acumulación de carbón (según sea necesario).
o Compruebe la temperatura de circulación del aceite en los precalentadores (diariamente).
o Realice una purga del fondo de la caldera para limpiar lodos y sedimentos, controlar el nivel alto de agua y controlar las concentraciones de tratamiento químico (mensualmente o según sea necesario).
o Controle el agua de reposición que se agrega a la caldera y/o a la unidad de alimentación de la caldera. Dado que el sistema funciona a través de un circuito cerrado, una cantidad excesiva de suministro de agua dulce (sin tratar, oxigenada) es perjudicial para los componentes de la caldera y, a menudo, es una señal de una fuga en el sistema.
o Mantenga una supervisión química rigurosa del agua de alimentación y un programa de tratamiento de agua verificado.
o Mantenga un cuaderno en la sala de calderas para registrar cualquier problema y mantenimiento de rutina.
o Revise la combustión, inspeccione los controles del quemador e inspeccione el funcionamiento del quemador.
o Realice un programa de inspección de trampas mensual.
o Realice un programa de inspección de tuberías para asegurarse de que todas las tuberías estén inclinadas en la dirección de la fuente de vapor (sistemas de vapor de una tubería) o drenaje de condensado (sistemas de dos tuberías).

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